"No es una transacción simple en la que compro un porcentaje concreto. Era necesario crear un modelo en el que pueda ampliar mi participación a través de opciones en los próximos años."
Aunque Wolff ha negado que el equipo británico haya vendido sus acciones por tener problemas financieros: "Frank y Patrick tienen los dos más de sesenta años y deben pensar en la próxima generación y en el futuro de su empresa. Saben que, al contrario que muchos otros posibles inversores, yo tengo interés a largo plazo. Para Williams, fue un buen primer paso para asegurar su futuro y para mí era una oportunidad de entrar en un equipo puntero. Una situación buena para los dos."
¿Quedará Williams F1 en manos de Wolff en un futuro no muy lejano?