"Creo que se ha exagerado. Era una curva razonablemente lenta. En realidad el riesgo de que alguien muriera era muy, muy escaso", explicó Irvine a la BBC. "No fue un gran accidente, para ser honesto".
"Cuando uno planea chocar, se puede chocar como se quiera, así que la idea de que es el caso de trampas más increíble en el deporte profesional, como he leído, está totalmente fuera de lugar," comenta el ex piloto de Ferrari.
Irvine opina que los amantes de la Fórmula Uno la quieren tal y como es: algo así como coches rápidos, mucha tecnología y... grandes dosis de polémica. "En los últimos años ha habido estas grandes esfuerzos para hacer la Fórmula 1 políticamente correcta y un mundo maravilloso preciosamente embalado para los constructores, pero realmente no hay nada que hacer porque sería tan aburrido…"El irlandés tambien cuestiona la creación de nuevos circuitos totalmente seguros con grandes escapatorias. "Se ha llegado al caso de que cuando uno mira a esas nuevas pistas que están llegando… son tan bonitas, tan bien hechas, con esas escapatorias tan amplias y ese césped que no es césped, que es asfalto pintado… pero sin emoción. La Fórmula 1 siempre ha sido un espectáculo".
"Los grandes de la competición automovilística como Colin Chapman y Enzo Ferrari hacían lo que fuera para ganar. Así debería ser la Fórmula 1. La Fórmula 1 no es un deporte puro. Trata más sobre gladiadores que sobre otra cosa, y creo que es así cómo debería ser, y no estas cosas políticamente correctas cuando los coches ruedan como en una pista de Scalextric y los más rápidos ganan".