Pero el inglés se ha defendido ante las acusaciones diciendo que es "un digno campeón del mundo. Tengo el número uno en mi coche y me lo merezco".
El británico llegaba a Singapur con un punto de ventaja sobre su principal rival, Felipe Massa, por lo que asegura que no intentaba conseguir diez puntos en la cita asiática, ya que decidió que no se iba a arriesgar para conseguir más puntos de ventaja, solo quería mantener el liderato.
"Cuando eres el líder del campeonato hay una mentalidad diferente a cuando lo estás persiguiendo. Estaba pensando en el campeonato, en las carreras restantes y en conseguir los puntos que necesitaba para ganar el título. Si hubiera necesitado victorias, hubiera ido a por ellas", decía Lewis."Yo estaba pilotando con un ojo puesto en el campeonato del mundo y no iba a asumir demasiados riesgos. Estaba feliz por terminar en el podio", añadió.
Para finalizar, Hamilton mencionó la sanción que le impusieron tras la carrera de Spa la pasada temporada, cuando cortó la última chicane del circuito y la FIA le penalizó, por lo que finalmente consiguió una tercera posicion después de haberse subido al escalón más alto en la ceremonia del podio. Para él, en esa carrera consiguió la victoria.
"Hay cosas que sucedieron el año pasado, como sanciones, que afectaron a mis puntos. Y sigo pensando que gané en Bélgica. Creo que esa carrera fue mía", finalizó.
