"Sé es que hay algo fundamentalmente podrido y el mal está en el corazón de la Fórmula Uno", dijo Stewart en Auto Trader, que no quiso centrarse en el caso de Renault en detalle para dejar claro que es una tendencia global.
"Nunca en mi experiencia en la F1 he visto un estado de ánimo de auto-destrucción," comenta JYS. "Millones de aficionados se sorprenden, si no se disgustan, en un deporte que ahora va de crisis en crisis con todo el mundo culpando a los demás".
"Hay un nerviosismo y miedo dentro de los equipos, no es saludable. No hay respeto ni confianza para los individuos o las instituciones que tienen por objeto regular y regir el deporte," reflexiona el campeón del mundo de Fórmula Uno en 1969, 1971 y 1973.Sir Jackie reconoce que una profunda modificación en los estamentos políticos del deporte sería clave para afrontar esta crisis. "Tiene que haber una reforma fundamental de todas las estructuras de gobierno y gestión de la F1, desde el punto de vista tanto regulador y como comercial", alentó Stewart que señaló las próximas elecciones de la FIA como el momento para que se produzca ese cambio.
"A menos que el liderazgo adecuado se establezca pronto en la F1 en todos los niveles, los patrocinadores comerciales y el deporte se veran seriamente afectados en los próximos años," finalizó el legendario piloto escocés.