Por aquel entonces, Ferrari y Michael Schumacher buscan el camino el camino del éxito. Damon Hill empezó fuerte ganando las tres primeras carreras, pero Jacques Villeneuve no le perdió la cara a la situación, y ganó la cuarta, logrando una cierta regularidad en las siguientes carreras. Al final, quedaron muy igualados antes del GP de Japón con el que finalizaba el mundial.
Para ganar, Jacques debía sacarle nueve puntos a Damon Hill, aunque éste no falló y al final toda la emoción se fue al traste ya que Villeneuve tuvo que retirarse por una avería. Este año, con Fernando Alonso y Lewis Hamilton compitiendo por el título, y con los Ferrari un poco más retrasados, se podría repetir la situación de que el Mundial se decida en la última jornada.