Brawn GP y Force India decidieron cerrar las puertas de Brackley y Silverstone, respectivamente, justo después de la pasada carrera de Budapest y por eso este lunes ya han podido volver al trabajo con el objetivo de introducir mejoras importantes en sus monoplazas para Valencia. El resto de la parrilla decidió esperar una semana más a cerrar sus fábricas tras el GP de Budapest, así que hasta el próximo día 17 no podrán volver a abrir.
La Federación introdujo esta norma del cerrado de fábricas pensando en reducir los costes de las escuderías, pero el director del equipo Force India, Andy Stevenson, no cree que eso se corresponda con la realidad y que lo mejor sería cerrar las 4 semanas.
"Cuando eran cuatro semanas se podían ahorrar algunos costes, porque se cierran fábricas grandes. Personalmente, creo que el ahorro ahora será mínimo y seguramente aumentará los costes porque hay que aumentar la producción antes y después del cierre. Ahorraremos un poco de dinero porque la fábrica está cerrada, pero tendremos que gastar un poco de dinero, así que se cancelará una cosa con otra."