Lo que sí ha prometido es intentar usar todos sus contactos para que la escudería que aún lleva su nombre (y de la que posee el 20%) no desaparezca, y para que todos los empleados de Hinwil no pierdan su trabajo: "Una cosa está clara, haré todo lo posible para salvar los puestos de mis antiguos empleados. Pero no puedo hacer milagros, ya no soy el jefe que está en el muro."
Peter fundó su equipo en 1993 y en 2005 se lo vendió a BMW con el objetivo de hacerlo grande, ahora espera que no desaparezca: "Le he dicho a la gente que utilizaré todos mis contactos, pero eso no garantiza nada. Soy solo un asesor. Al final, solo BMW en Munich puede decidir qué hacer. Una solución como la de Honda/Brawn es una opción, pero hay poco tiempo, hay que tener una solución preparada lo antes posible."
Por cierto, decir que Nelsinho Piquet ha preguntado a sus fans a través de su twitter que si les gusta el nombre de 'PiquetF1' para una escudería. ¿Estará pensando su padre en comprar BMW para hacerle a su hijo un equipo en el que correr (como ya hizo en las categorías inferiores)?