McLaren, Williams y Red Bull hicieron las delicias de los aficionados con un festival de trompos, derrapadas, etc. con el Kremlin y la Plaza Roja como escenario de fondo. Los encargados de hacer rugir a los V8 fueron el veterano David Coulthard, Kazuki Nakajima y Heikki Kovalainen, quien antes del evento se mostraba muy emocionado:
"Espero con mucho interés la demostración en Rusia. Moscú es una de las ciudades más hermosas del mundo, por lo que exhibir la maquinaria de la Fórmula 1 en ese lugar increíble ante tantas personas debe ser absolutamente apabullante. Es una ciudad que tiene muchas ganas de acoger un Gran Premio en el futuro."
Tras el salto os dejo con algunas imágenes.
Y para acabar, una imagen dirigida al público masculino: