"Por lo que respecta a los adelantamientos quizás esperábamos un poco más de las nuevas normativas," admite el ingeniero alemán, cuyo equipo marcha en octava posición del campeonato del mundo.
"En el aspecto de la reducción de costes, creo que sí se han hecho los progresos esperados. En cuanto a la restricciones aerodinámicas, creo que podrían ser mayores, así que creo que aún podemos hacer algo más", concluye Thiessen, que recientemente afirmó a la revista F1 Racing que su equipo se gasta un 40% menos que hace cinco años, cuando era suministrador de motores del equipo Williams.
Por su parte, Robert Kubica resalta la gran dificultad de la temporada es adaptarse a las diferencias entre los dos compuestos de neumáticos que Bridgestone suministra en cada Gran Premio. "Lo más complicado en cuanto a los neumáticos lisos es que este año existe una gran diferencia entre los dos tipos de neumáticos que tenemos disponibles en cada Gran Premio.""A veces uno de los compuestos trabaja realmente mal, pero las reglas especifican que debemos usar ambos tipos en carrera. Así es que intentamos realizar un stint muy corto con ese tipo de neumático", explica Kubica.
"En general, es más divertido pilotar con neumáticos lisos," proseguía. "Los neumáticos delanteros en particular parecen ofrecer más adherencia y se mueven menos, lo que permite al coche reaccionar más directamente."