Avanzando en el estudio del auto, se aprecia a los deflectores laterales, que preceden a los pontones, con una pequeña muesca para ayudar al fluido a sortear de mejor modo el pontón, mas en Mónaco se ha visto una verdadera evolución de esta pieza al incorporársele un perfil por sobre el deflector.
Si como dice el dicho: "Los pontones y la admisión son un mal necesario", los ingenieros lo han reducido de manera significativa, dado que las acotadas dimensiones de la admisión hablan de un gran entendimiento en el ingreso de aire para refrigerar el motor en su justa medida (se recuerda que a poco tiempo del inicio del mundial se cambió de proveedor de motores). A su vez, se observa un diseño muy estilizado del elemento en cuestión y que tiene mucho que ver con el empleo del controvertido "doble difusor", pero eso quedará para más adelante.
Las siguientes imágenes permiten apreciar cómo los soportes de los retrovisores contribuyen en la canalización del aire hacia las admisiones laterales, algo que se maximizó en Monte Carlo debido a las peculiaridades del trazado (lo cual nos hablará de los requerimientos de cada circuito del mundial en términos de refrigeración). Sin lugar a dudas una aplicación inteligente, puesto que hasta el momento se intentaba evitar que los retrovisores interfirieran en la corriente de aire, tal cual impuso Ferrari en 2004.
En la admisión superior se advierte otra interesante innovación del BGP001, si bien son varios los diseños que retrasan la caída de la misma para favorecer el paso del flujo de aire por tal sector, el hecho de utilizar la barra antivuelco como un elemento aerodinámico, supera por mucho las expectativas. Con la misma intención que otros componentes, la función de éste es la de apresurar el transito del aire por tal zona para optimizar la dinámica del coche, pero a diferencia de los demás, no es para generar un mayor nivel de Down-Force, sino para ayudar a que el fluido asimile de mejor modo la silueta del cubremotor (Efecto Coanda para los entendidos del tema).
Relacionado con el concepto del Efecto Coanda (en próximos informes se hablará sobre ello, pero mientras tanto los interesados ya tienen algo con lo cual entretenerse), las protecciones laterales de la cabeza del piloto también han sido estudiadas para afectar del menor modo posible al flujo que les transite, a la vez que se advierte que la "caída" de las mismas llegan casi hasta la finalización de la carrocería.
En la parte superior del cubremotor se aprecia una sutil extensión del mismo a modo de perfil ("Aleta de Tiburón") para permitir un mayor orden en el flujo que transita por tal lugar, disminuyendo la turbulencia, y por consiguiente el arrastre ("drag"), para así mejorar la eficiencia del ala trasera (la sombra en la imagen permite advertir correctamente la disposición de tal aditamento). Su reducido tamaño en comparación con el RB5 puede deberse a que no es conveniente que sea muy grande en el transito de curva, ya que es una cara plana contra el corriente de aire, y mientras más prolongada sea, menor será la fuerza necesaria para desestabilizar el vehículo (algo conocido como Momento de Brazo de Palanca, o simplemente Palanca).