Para Ecclestone los cargos a los que se enfrenta McLaren por sus mentiras a los comisarios son incluso más graves que los del pasado escándalo de espionaje, con el agravante de la reincidencia de la escudería. "Nunca es bueno para nadie volver ante un tribunal tan rápidamente y por un caso similar, " aseguraba Ecclestone en declaraciones al diario Express.
Las opciones que baraja la FIA -que recordemos no tiene límite en sus sanciones- podrían pasar por la exclusión por una o varias carreras -como le ocurrió a BAR en 2005-, elevadas multas económicas -lo aplicado a McLaren tras el escándalo del espionaje en 2007- o como medida más extrema, la exclusión del Campeonato.
"Hay muchas opciones abiertas, pero sería terrible que cualquier equipo resultara excluido de una o más carreras. Pero podría pasar," insistía Ecclestone, que considera la actuación de McLaren un 'fraude' para la Fórmula 1.