Una vez acabada la primera cita del Mundial, los aficionados pudieron contemplar los nuevos monoplazas con el Halo por primera vez a través de las retransmisiones televisivas. Con la incorporación de este elemento, identificar los cascos de los pilotos se dificulta, aunque se pueda averiguar con su número o por pequeños detalles.
Sobre esta constante polémica, los pilotos de Ferrari hablaron al respecto, destacando que su visibilidad no se ve limitada y que ayudó en gran medida porque tapaba la luz del sol. Kimi Räikkönen comentaba que los aficionados se acostumbrarían rápido y que no afectaba para ver la pista. Por otro lado, Sebastian Vettel defiende las palabras del finlandés ya que, a veces, ayudó como 'parasol'. El único punto negativo para el alemán es que no podía ver a los aficionados que estaban en las gradas. A pesar de este 'obstáculo', ellos piensan que no es un problema para su pilotaje.
Kimi Räikkönen, defendiendo el Halo
"Ahora esta es la norma, pienso que no hay diferencia para la visibilidad. Cada año tenemos una regla distinta, el coche luce diferente pero la gente se acostumbrará muy rápido. No encontré diferencia entre los test y ahora, no es algo que afecte en absoluto. Pienso que el Halo ha sido de gran ayuda porque bloqueaba los rayos del sol".
Sebastian Vettel, apoya a su compañero
"Pienso que ha sido muy beneficioso y seguro. Quizá la gente no le gusta como es, pero es bueno tenerlo. Durante la carrera, no hubo problema, como dice Kimi, incluso nos ayudó. El Halo funcionaba como un parasol. En la vuelta de formación, sí afectaba porque no podía ver la gente que había en las gradas. Lo intenté, pero no podía. A pesar de eso, no había diferencia".
