Honda continúa ligada, en cierto modo, a Fernando Alonso. Y es que, aunque la marca japonesa trabaje ahora mano a mano con Toro Rosso, ha dejado una estela muy difícil de borrar para McLaren, y más aún para el piloto español. El bicampeón del mundo ha querido hablar sobre el mal arranque de Honda en el Gran premio de Australia, en el cual regresaron sus problemas con el MGU-H, y ha asegurado que lo sucedido era lo previsto, pues rodaron en la zona baja de la parrilla y con problemas en la unidad de potencia. Igualmente, ha recalcado que su relación con el fabricante japonés continúa siendo buena.
"No estoy mal con ellos, y menos aún con los que venían a las carreras, ya que era un problema más de diseño. Los que estaban con nosotros en los circuitos trabajaban día y noche; no descansaban nunca. En Australia les ocurrió lo que estaba previsto, iban entre los cuatro últimos y rompieron el motor", ha comentado en unas declaraciones recogidas por el diario El Periódico.
2018, su año más exigente
De igual modo, Alonso ha querido rememorar los complicados años que vivió junto a Honda, una etapa en la que aproximarse al Top 10 era un buen resultado; algo muy difícil de experimentar para alguien que ha logrado dos Campeonatos del Mundo. Asimismo, ha admitido que si no hubiera pasado por esos malos momentos quizás nunca se hubiera embarcado en otros proyectos como Indianápolis o el Mundial de Resistencia: "Es complicado vivir sin ganar, pues mi vida se basa en la competición, y triunfar es una de las vitaminas para seguir adelante, de modo que cuando las victorias no llegan supone un golpe duro, pero hay que continuar progresando, porque al hacerlo también aprendes muchas cosas. Lo vivido durante estos años ha abierto mis miras hacia carreras legendarias, en las cuales sabes que tienes más igualdad que en la Fórmula 1. Sin estos años de dificultades, quizá no hubiera ido a Indianápolis o no me hubiera embarcado en el Mundial de Resistencia. Y, además, ahora me considero un piloto más completo. Siempre se tiende a decir que ahora que te has ido, mira qué bien va el Honda. Cuando dejé Ferrari, ocurrió lo mismo", ha proseguido.
En lo referente a la temporada 2018 de Fórmula 1, el piloto asturiano ha admitido que Mercedes, Ferrari y Red Bull aún no están al alcance de McLaren, pero se ha atrevido a vaticinar que en el segundo tramo del Campeonato el equipo será más competitivo, recordando cómo en el año 2012, durante su estancia en Ferrari, la escudería italiana empezó la campaña muy irregular y estuvo a punto de ganar el título (al español únicamente le separaron tres puntos de Sebastian Vettel): "Por ahora no estamos al nivel de Mercedes, Red Bull o Ferrari, pero somos McLaren, y en la segunda parte del Mundial vamos a estar ahí. En 2012, cuando militaba en Ferrari, no estábamos en ese grupo al comienzo del año, pero llegamos líderes a la última carrera del Mundial", señala. Entretanto, Alonso ha reconocido su entusiasmo por afrontar nuevos retos en otras categorías, manifestando que prefiere "correr cada domingo a estar aburrido en casa". Recordemos que el 5 de mayo participará en la primera prueba del WEC, las 6 Horas de de Spa-Francorchamps.
