A falta de pocos días para que comience la temporada 2018, los pilotos valoran el rendimiento de sus monoplazas tras los test de Barcelona. En el caso de Sauber, Marcus Ericsson destaca que la alianza con Alfa Romeo ha sido positiva, esperando que sean más competitivos en comparación a 2017. Para este año, cree que estarán peleando por buenas posiciones ya que con la nueva unidad de potencia darán un paso adelante.
Por otro lado, el sueco se muestra motivado porque tendrá a su disposición muchas armas nuevas, pero la más importante será el motor. Aunque desarrollaran el coche durante la temporada pasada, siempre arrastraban el hándicap de su unidad de potencia.Confianza para 2018
"Sigo creyendo que estaremos en la mitad de la parrilla, aunque más cerca de la parte baja. Es difícil saber después de los test, pero si podemos equilibrar correctamente el coche, hacer que los neumáticos funcionen en Melbourne, deberíamos estar luchando y no como el año pasado. Ese es el objetivo y esperemos que sea el correcto".
"La motivación es alta porque sabemos que tenemos todas las herramientas este año: tenemos un coche nuevo, pero también un motor nuevo y potente, y eso siempre fue un problema el año pasado. Incluso mejorando el coche, siempre supimos que nos faltaba mucho con la unidad de potencia".
"Para ser sincero, ahora me siento mejor. Pero todavía tenemos cosas que aprender con el coche, así que no podemos esperar estar en nuestro mejor momento en Melbourne. Aunque llegaremos allí con fuerza".