"Nos quedamos sin potencia. El equipo está investigándolo. Saldremos a pista lo más pronto que podamos". Tales han sido las declaraciones dese McLaren después de que, en este primer día de la segunda semana de las pruebas de pre-temporada en Barcelona, Montmeló, el Mcl33 sufriera un apagón que obligara a Stoffel Vandoorne a poner en paréntesis la jornada de entrenamiento.
Menos de una hora llevaba el desarrollo de la sesión, cuando, a las 10:00 de la mañana, veíamos a Vandoorne parado en pista, en plena recta del circuito. Así, comenzaba la segunda semana de testing del mismo modo en que comenzó la primera: con McLaren presentando problemas, que recuerdan a tiempos pasados y provocan escalofríos a más de uno.Dos fallos en una hora
Dos fueron las ocasiones en las que hemos visto a Vandoorne padecer algún fallo en su mooplaza a primera hora del día. Después de una semana que cerraban con optimismo a pesar de haber hecho una cantidad mínima de kilometraje (que no se debía a fallos en la fiabilidad sino a las condiciones climáticas), la segunda semana de pruebas en Montmeló se estrenaba con una entrada en el garaje demasiado precoz como para no alarmar a los testigos de la sesión. La primera vuelta de instalación acababa con una escena lastimosa: los mecánicos empujando el coche de Vandoorne hasta el garaje.
No track action for McLaren since the red flag on Tuesday morning ?#F1 #F1Testing pic.twitter.com/Ewpmn2CYxp
? Formula 1 (@F1) 6 de març de 2018
Tras una puesta a punto instantánea por parte del equipo de mantenimiento, el coche volvía a la pista al poco tiempo, nada más que para provocar la primera bandera roja del día y de la semana, incapaz de finalizar una sola vuelta. El Mcl33 quedaba parado en plena recta a unos metros de la línea de meta. "Hemos sufrido un fallo energético, lo que significa que hemos perdido los datos", explicaban desde McLaren. A estas horas, el monoplaza de Stoffel Vandoorne todavía no ha vuelto a pista.