Marcus Ericsson adelantó que el monoplaza que Alfa Romeo-Sauber tiene preparado para 2018 es sumamente importante para la escudería en términos de estética y potencia, sobre todo por el cambio que implica contar con un motor Ferrari.
Tras haber visto los diseños computarizados del nuevo C37, el piloto sueco comentó que: "luce bastante hermoso, seguro se traducirá en un importante paso hacia adelante [...] el equipo se siente bastante confiado y deseoso de mostrar que todo saldrá bien".El piloto declaró que no considera que los lazos de Sauber con Alfa Romeo son los únicos que pueden ser un parteaguas para la escudería, sino que se puede traducir en un gran salto tener el mismo motor que la potencia italiana. "La alianza con Alfa Romeo significa el regreso de una marca histórica a la F1. Es una razón más para creer que Ferrari nos brindará el más grande apoyo. Cuento con ello", declaró Ericsson.
Haas y Toro Rosso en la mira
Pese a haber terminado en último puesto en el campeonato de constructores de 2017, el piloto tiene claro quienes son los equipos a alcanzar, y vencer para este año:"vamos contra Haas y Toro Rosso, aunque creo que la próxima temporada se tornará bastante impredecible en algunas carreras", y agregó: "todo podría marchar bien en ciertos puntos y podríamos competir con Renault y Force India, pero sin duda habrá otras carreras en las que tendremos problemas y nos iremos para abajo".
Para Ericsson es claro que la meta es alcanzar a los equipos que se encuentran a la mitad de la tabla, pero también le parece que la batalla estará bastante cerrada en cada Grand Prix, "quiero estar en la mejor forma posible para encontrar la satisfacción que perdimos en 2017".