El joven recluta ruso de Williams responde con indiferencia ante todos aquellos que consideran que su asiento junto al de Lance Stroll en la alienación de los de Grove responde a nada más que a los aspectos económicos tan beneficiosos que la transacción supone para la escudería británica. Sergey Sirotkin ha hecho oídos sordos a cada una de las acusaciones que se han hecho ante su fichaje, fruto de una disputa que desde invierno se fraguó entre, sobre todo, el joven de 22 años y Robert Kubica, que finalmente no consiguió el puesto de piloto titular. A Sirotkin lo respalda el banco SMP, cuyo representante en el ámbito del patrocinio deportivo es el antiguo piloto finés Mika Salo, que ha salido en defensa del joven ruso. Salo aseguraba que Sirotkin no tiene un ápice de 'piloto de pago' sino que más bien se trata de un movimiento por parte de Williams que responde a una necesidad a la que el piloto ruso significaba una solución correcta, más conveniente que las otras opciones.
"Williams es una buena opción para Sirotkin. Es un buen equipo, y tener un compañero de equipo tan joven como él será genial, los dos están igual de hambrientos", explicaba Salo. "Sirotkin es un chico inteligente, tiene un alto conocimiento en ingeniería y tecnología y tiene una experiencia suficiente como piloto de Formula 1 gracias a Renault", añadía el ruso. A la hora de decidirse por un pronóstico entre ambos pilotos, entre el canadiense y su compatriota, Salo prefería no inclinarse explícitamente por ninguno de los dos. "En mi opinión, son bastante idénticos, pero solo podremos diferenciarlos una vez las carreras comiencen. Estoy seguro de que ambos lucharan bien duro el uno contra el otro, lo que empujará a Williams hacia delante, trayendo buenos resultados para ellos", explicaba Salo.
En Williams no habrá jerarquías
Por otra parte, el billonario ruso ha salido también en defensa de su protegido, negando de una forma tajante que la decisión de Williams se deba a su poder monetario. Las críticas se basan en la igualdad de resultados de los test de Abu Dabi en noviembre justo al finalizar la temporada 2017, lo que a muchos ha llevado a pensar que el paquete millonario que Boris Rotenberg ofrecía junto al talento de Sirotkin fue lo que inclinó la balanza finalmente. "Sergey fue más rápido que Kubica", aseguraba Rotenberg. "En relación con todas aquellas personas que dicen que Sirotkin se compró el asiento: eso no es nada más que pura mentira. El chico ha estado trabajando para esto a lo largo de cinco largos años desde que se unió a nuestro programa de jóvenes pilotos. La financiación nunca puede jugar el papel decisivo", explicaba el ruso. Añadía Rotenberg que el acuerdo con Williams indica que el dinero de su compañía será usado para el desarrollo del coche, lo que, en su opinión, es un trato perfectamente razonable.
"Naturalmente que hay costes que pagar. El deporte de motor no es barato, no es un juguetito con el que me entretengo", decía el magnate ruso. Tampoco parece que este acuerdo de financiación resulte, según Rotenberg, en una jerarquización de los pilotos en favor del joven Sirotkin, y niega, del mismo modo, que la genética de Stroll suponga, por su parte, un peso de la balanza del lado del canadiense. "No me parece nada de eso", respondía el ruso. "Está claro que, aunque sean un solo equipo, en la pista cada hombre habla por sí mismo. Para Sirotkin, el precepto a seguir será correr cada carrera como si fuera la última, aunque estemos con él ayudándole a ir cada vez más rápido", explicaba Rotenberg. Por su parte el propio piloto declaraba con pasividad e indiferencia, sabiendo que el papel que le toca representar como foco de las miradas le es más conveniente lucirlo en pista que en rueda de prensa. "No me interesan las etiquetas del estilo de 'piloto de pago', la gente escribe cosas, pero ¿de dónde sacan la información? Si alguien sabe algo, y puede confirmarlo con datos, que lo haga, por favor", pedía Sirotkin.
