El piloto de Red Bull no le da importancia a las comparaciones que hacen de él con grandes ex pilotos de la historia de la Fórmula 1, al menos eso es lo que comentó en una entrevista exclusiva con el reconocido periodista de deportes holandés, Wilfried de Jong, a quien dijo que realmente no es "fan de ser comparado con nadie".
"Trato de concentrarme en mí mismo," respondió cuando de Jong le cuestionó si está de acuerdo con los comentarios que implican que él es el nuevo Ayrton Senna. "Es agradable oír que la gente es positiva, pero no es algo en lo que piense mucho. [...]En la Fórmula 1, puedes pasar de ser un héroe a ser nada en apenas un momento".
"Siempre he creído que tienes que pensar en ti mismo como el mejor, si no lo haces ¿cuál es el punto en competir?," es esto lo que expresó Verstappen al pedirle su opinión sobre quién es el mejor piloto de la F1 hoy día.
"El objetivo es ser el mejor y tengo que probarlo cuando tengo oportunidad," insistió. "Eso obviamente depende del auto, pero espero ser capaz de mostrarme a mí mismo más seguido".
Creciendo con los grandes
Verstappen vivió su infancia en los pasillos de los grandes premios, en el paddock rodeado de figuras icónicas de la máxima categoría del automovilismo, y sobre ello comentó: "Nunca me puse a pensar que estábamos pasando vacaciones con el gran Michael Schumacher [...] era muy joven y estaba demasiado ocupado jugando con su hijo (Mick)".
Y es justo esa misma cercanía con personalidades de la talla de Helmut Marko, a quien él considera un segundo padre, lo que lo ha traído a la posición profesional que detenta hoy; con un asiento en una escudería como Red Bull, donde ha conseguido destacar en apenas tres años pilotando en la F1.
Prefiere los retos modernos
Sin embargo, cuando se trata de figuras históricas del deporte, el holandés admite que su interés es limitado y sus conocimientos no amplios, y queda claro que el jóven piloto de apenas 20 años no tiene miras al pasado, pues no reconoció a Jim Clark en una fotografía que le mostró el entrevistador.
"Tipos como Sebastian Vettel aman los autos y bicicletas antiguos, yo soy más moderno", dijo. "Sé un poco de ello, pero mi conocimiento no va tan atrás [...] Sé sus nombres, pero los coches viejos realmente no son de mi interés".
Aunque afirmó que se toma como un desafío personal cualquier cosa que se pueda llevar al límite, dejó ver que los monoplazas antiguos simplemente no le causan ninguna emoción: "Nunca he sentido el impulso de conducir alguno de esos autos, simplemente son demasiado viejos, demasiado lentos".
