Max Verstappen iguala, por el momento, su peor arranque de temporada. Cuatro veces en ocho carreras, son las que los problemas de fiabilidad de su monoplaza le han obligado a bajarse antes de tiempo. La situación comienza a enfadar al piloto holandés, pese a su juventud y la difícil situación, decidió actuar fríamente y no hablar con la prensa tras la carrera. Aunque posteriormente fue multado, Max [Verstappen] pensó que esto sería lo más inteligente y prudente.
Descolgado de la lucha en la parte alta de la clasificación de pilotos, Verstappen se encuentra en la sexta posición. Tras ocho citas ha logrado sumar 45 puntos, siendo tres veces quinto y con tan solo una visita al podio, un tercer puesto en el Gran Premio de China. Pero los problemas de fiabilidad no acaban con el hambre de Verstappen, que habla de sus ganas de poder sumar más puntos.
Molesto por los problemas de fiabilidad
"Durante la carrera no estaba pensando en problemas de fiabilidad, pero de repente tuve uno de nuevo. Es realmente molesto caer otravez cuando estás en una posición tan buena, más si te fijas en lo que sucedió después. El equipo sigue investigando el problema, definitivamente es algo con el motor. El sábado, durante la clasificación tuve que afinar el motor como el único piloto de Renault [Nico Hülkenberg], eso fue bastante raro. Ahora el motor está acabado, podemos poner uno nuevo. Creo que nos sorprendió positivamente en Bakú, el coche lo estaba haciendo bien. Pero realmente quiero ganar puntos. En términos de velocidad absoluta, todo el año ha sido bastante bueno. En cuanto a la puntuación la verdad es que no lo ha sido".
"El equipo espera que haga lo mejor que pueda y espero que todo sea perfecto en Red Bull, el motor también. Es muy duro. Este fue un problema de motor y, por desgracia, no es la primera vez. El miércoles estaré en el simulador, al menos allí el motor no se puede romper".
No hablar, lo más inteligente
"Me quedé en la pista media hora para hablar de la carrera y el equilibrio del coche con mis ingenieros, luego me fui. Pensé que era lo más inteligente que podía hacer. Absolutamente no hay [conspiraciones]. Si nos fijamos en lo duro que los chicos trabajan día y noche para hacer que el coche funcione a la perfección; ellos también se enfadan cuando se rompe".
Sobre la victoria de su compañero, Daniel Ricciardo, comentó: "Ya estaba decepcionado como estaba, si miras las posiciones, entonces puedes imaginar fácilmente tú mismo".
Azerbaiyán 2017