Vuelven los problemas de agarre para Lewis Hamilton

No es ninguna sorpresa que los neumáticos de Pirelli vuelvan a ser el centro de atención en este Gran Premio de Azerbaiyán. Desde principios de año, los equipos y pilotos se han quejado de la extrema dureza de estas gomas y su dificultad para ser calentados y, por lo tanto, conseguir un nivel de adherencia adecuado. Esta vez, vuelven los problemas para Hamilton, que se ha encontrado con contratiempos parecidos a los de Mónaco.

No pierde la esperanza

Después de un triunfal regreso del Gran Premio de Canadá, donde el inglés recortó las distancias con Sebastian Vettel en la clasificación, Hamilton ha llegado a Bakú con similares problemas de agarre que ya tuvo en Mónaco o Sochi y que le imposibilitaron la lucha por los puestos de cabeza.

Mercedes ha tenido varios problemas en este asunto, encontrando demasiadas dificultades para poner en temperatura los Pirelli y, aunque parecía que ya estaban resueltos, vuelven a aparecer este fin de semana. Sin embargo, parece que su compañero Valtteri Bottas funciona mejor que el tricampeón en estas condiciones de poco agarre: salió victorioso en Rusia y acabó cuarto en Mónaco.

"Ha sido un día duro. Conseguir poner los neumáticos en temperatura ha sido muy complicado, tal y como pensábamos que iba a suceder. Han sido unas problemáticas sesiones, pero seguimos aprendiendo y trabajaremos tan duro como sea posible para estar arriba mañana. El agarre es muy malo, muy malo para todo el mundo. Pienso que todos están teniendo problemas para meter temperatura a las gomas, tanto Red Bull como Ferrari, aunque unos más que los otros", explicaba el inglés.

"Todo el mundo está sufriendo en el pit lane, estas gomas son demasiado duras, muy duras. No puedes llegar a este sitio tan caluroso, con el asfalto a cincuenta grados y que los neumáticos no funcionen, no tiene sentido. Sin embargo, creo que aún estamos en la lucha por la pole. Valtteri ha mostrado un gran ritmo y si hubiera finalizado mi vuelta también hubiera estado ahí arriba. Definitivamente es muy complicado porque hay una pequeñísima ventana donde estas gomas funcionan, particularmente en esta pista. Hoy he tenido un 20% más de banderas amarillas que nunca antes, eso muestra lo complicado que es", afirmaba Hamilton.