Previo del GP de Australia 2017

El Gran Premio de Australia ha sido un evento fijo en el calendario de la Fórmula 1 desde 1985. La carrera ha tenido dos hogares desde entonces: Adelaida (1985-'95) y Melbourne (1996-presente) donde la carrera se celebra en Albert Park. Es una de las carreras más históricas de este deporte. Solo son más antiguos diez de los grandes premios de esta temporada y Albert Park ha tenido una vinculación con la F1 desde hace mucho tiempo, ya que albergó el GP de Australia cuando no formaba parte del Mundial en los años 50, un evento que ganó dos veces Stirling Moss.

El Gran Premio de Australia de 1991 es el gran premio más corto que se haya registrado. Se paró tras 14 vueltas (52,920km/32,886 millas) por las fuertes lluvias, y acabó llevándose el triunfo Ayrton Senna. Después de un invierno de trabajo y preparación por parte de los equipos, Melbourne ofrece una primera vista al orden competitivo, y eso es sin hablar del sol y del fondo pintoresco de la segunda ciudad más grande de Australia.

Además del Gran Premio de Australia de Fórmula 1, Melbourne es la sede del Open de Australia de tenis, la Melbourne Cup de carreras de caballos, los mundiales de surf en Bells Beach y en Philip Island, que se encuentra a solo 50km, la carrera de MotoGP de Australia. McLaren es la escudería más laureada en la historia del Gran Premio de Australia, donde ha ganado 11 veces y ha ocupado 26 podios. Hasta día de hoy, ningún piloto australiano ha logrado la victoria en el Gran Premio de Australia de F1.

Antes de que la acción llegue este viernes con la primera sesión de libres, la atención se centrará este jueves en la primera rueda de prensa oficial de la FIA. Como novedad, este año la federación ha decidido contar con más pilotos cada jueves, por lo que la rueda de prensa se dividirá en dos partes: la primera de ellas, de 25 minutos, tendrá a Fernando Alonso, Lewis Hamilton, Daniel Ricciardo y Sebastian Vettel. La segunda, de misma duración, juntará a Valtteri Bottas, Felipe Massa, Esteban Ocon y Lance Stroll. El viernes, la estructura de la rueda de prensa de los representantes de equipos y motoristas sigue igual. En Melbourne se unirán Maurizio Arrivabene (Ferrari), Eric Boullier (McLaren), Christian Horner (Red Bull), Paddy Lowe (Williams) y Toto Wolff (Mercedes).

Mercedes ya parte como favorito

Desde 2014, Mercedes ha demostrado que no hay equipo que le bata ahora mismo en toda la parrilla de la F1. Con el cambio de reglamento de cara a 2017, muchos esperaban que la cosa cambiara, pero según lo visto en los entrenamientos de pretemporada, los chicos de Brixworth y Brackley parece que no van a dejar de luchar por las victorias. Cierto es que Ferrari parece haber dado un gran salto adelante y puede estar batallando con el Goliath de la F1, pero muy bien han de irles las cosas a los de Maranello si quieren volver a estar al frente del resto.

Por su lado, los chicos de Red Bull también se han alzado como alternativa contra Mercedes durante este invierno de entrenamientos. A pesar de que siguen estando por detrás en cuanto a rendimiento, los de Milton Keynes han creado un buen coche. Sin embargo, en su contra está la potencia del motor, ya que Renault sigue estando por detrás de Mercedes, aunque desde la marca francesa aseguran que habrá mejoras importantes. Además, después de la eliminación del sistema de tokens, los motoristas tienen permitido desarrollar sus unidades a lo largo del año.

En la zona media, Force India, Renault, Williams y Toro Rosso podrían estar peleando de nuevo por estar siempre en zona de puntos cada fin de semana. Por ahora, los de Grove parecen los más fuertes de este conjunto, pero con 20 carreras por delante todo puede ocurrir. Quien sí lo tiene crudo es McLaren. Su pretemporada ha sido horrorosa: han usado más motores que nadie, han rodado menos vueltas que nadie y son los que menos confiados van a Australia. Con un arranque peor incluso que el de 2015, los cimientos de la asociación renacida entre McLaren y Honda empiezan a quebrantarse.

El circuito de Albert Park

Albert Park, en Melbourne es el marco ideal para dar comienzo a la nueva temporada de Fórmula 1. El Gran Premio de Australia ofrece, sin un orden particular, una multitud de aficionados bien informados, una estricta prueba para los pilotos y los monoplazas y, tras un oscuro invierno en el hemisferio norte, la oportunidad de que tanto equipos como pilotos se reencuentren con el brillo del sol. Tras un exigente programa de pruebas durante el invierno, todo el mundo está encantado de llegar a la capital victoriana y ver cómo se reanuda la competición.

La dificultad más obvia de Albert Park es que está muy lejos de casa. Eso no sería ningún problema algo más avanzada la temporada, pero en marzo los retos del nuevo monoplaza, normalmente muy revisado tras el test final de pretemporada, requieren que el equipo esté a la altura, tato con su conocimiento sobre la máquina como con su capacidad para suministrar los componentes necesarios.

Si la temporada comenzara en cualquier otro lugar el reto sería menor, pero Albert Park incluye todos los aditamentos de un trazado urbano: poco agarre, un firme no uniforme y la intimidante cercanía de unos impasibles muros. Ningún equipo o piloto tendrá una bienvenida placentera en el mundial de Fórmula 1 de 2017.

Una complicación añadida es el alto nivel de evolución de la pista a medida que la trazada se limpia de suciedad y se va depositando goma sobre el asfalto, lo que provoca que los tiempos mejoren de un modo importante. La clave está en no precipitar el setup para la carrera; los mecánicos tienen que prever cuál será el nivel de agarre el domingo por la tarde en lugar de hacer un setup basado en las sesiones de práctica.

Notas técnicas

-Número de vueltas: 58

-Longitud del circuito: 5,303 kilómetros

-Distancia total de carrera: 307,574 kilómetros

-Récord de vuelta: 1:24.125 (Michael Schumacher, 2004)

-Nivel de estrés en los neumáticos: 25%

-Nivel de carga aerodinámica: 80%

-Nivel de agarre del asfalto: 25%

-Nivel de carga lateral: 45%

-Nivel de abrasión del asfalto: 65%

Pirelli lleva el compuesto ultrablando a Australia por primera vez. Han entrado en vigor nuevas normas acerca de la salida de la carrera (en la que los pilotos tendrán más control sobre el embrague) y de la resalida desde la parrilla después de la neutralización con el coche de seguridad en caso de pista mojada. Desde Australia y hasta España, los equipos tendrán selecciones idénticas de neumáticos: siete juegos del compuesto más blando disponible, cuatro juegos del compuesto intermedio y dos del compuesto más duro. En Australia, estos son el ultrablando, el superblando y el blando, respectivamente.

Durante el Gran Premio de Australia la FIA ha decretado dos zonas de DRS. El punto de activación de la primera zona se encuentra 762 metros antes de la primera curva, mientras que el punto de activación de la segunda zona de DRS está 510 metros antes de la curva 3. Las dos zonas comparten el mismo punto de detección, situado trece metros antes de la curva 14.

Meteorología, apuestas y horarios

El fin de semana en Melbourne viene cargado de calor y humedad. Desde el viernes, las temperaturas podrán subir hasta los 25 o 26ºC, alcanzando los 30ºC el domingo, día de carrera. A pesar de la humedad y de la presencia de algunas nubes en el cielo, la lluvia no llegará al circuito de Albert Park, un factor que los equipos preferirán tener alejado, ya que al ser la primera carrera del año y contar con coches tan nuevos, las escuderías necesitan sumar más kilómetros.

En lo que respecta a las apuestas, los chicos de Ferrari y Mercedes se reparten las primeras posiciones. Lewis Hamilton parte como el favorito para llevarse la pole del sábado en clasificación y la victoria de carrera el domingo. Por detrás, Sebastian Vettel se interpone entre los Mercedes como segunda opción favorita entre los apostantes, tanto el sábado como el domingo. Valtteri Bottas y Kimi Räikkönen, en este orden, cierran los cuatro primeros puestos en las casas de apuestas.

Horarios del Gran Premio de Australia 2017*

*Horario peninsular español