La razón de la decisión no ha sido ningún incidente en pista, sino que la climatología no permite despegar al helicóptero médico, y atendiendo a la regulación de la FIA, está prohibido que los monoplazas rueden si el helicóptero no puede actuar ante un eventual accidente.
Sin duda, y pese al retraso que esta pueda provocar entre los equipos, parece una norma muy acertada por parte de la FIA.
Se espera que los test se retomen a poco que las condiciones mejoren. En cualquier caso no está siendo una buena semana de test para los que eligieron Portimao. Desde el domingo, en el que ya algún monoplaza salió a pista, la lluvia y la humedad han sido los factores claves sobre el asfalto luso. Sólo ayer por la tarde se vieron los neumáticos slicks en pista.
Parece que el clima, en lo que queda de día, no cambiará significativamente, pero esperemos que al menos los monoplazas puedan salir a rodar para recabar alguna información.