"Siempre considero como algo positivo el ser un tema de conversación dentro de la Fórmula 1. Independientemente de que hablen bien o mal sobre ti, lo importante es que hablen de ti, eso siempre es bueno. La atención mediática no me afecta ya que, para mi, lo más importante es evolucionar en la pista y eso es en lo que me concentro", explicaba Max Verstappen.
"Mis recuerdos de Malasia 2015 son muy positivos; el fin de semana empezó siendo algo complicado, pero conseguimos salir adelante. Incluso en la clasificación lo bordamos con un 6º puesto en parrilla, aunque luego en la carrera no tuve un buen comienzo, pero al menos conseguimos sumar puntos y lo disfruté mucho. Es un circuito bueno para competir con el resto y en el que la humedad en tu cuerpo es mayor, lo cual hace todavía más interesante la carrera. Estoy impaciente por volver", concluía el de Red Bull.
Precisamente en el GP Malasia 2015, Max Verstappen se convertiría en el piloto más joven de la historia en puntuar en un Gran Premio de Fórmula 1, tras terminar en una brillante 7ª posición con 17 años y 180 días de edad.