El hecho de que, en un circuito a priori favorable para Toro Rosso, no fueran capaces de alcanzar el ritmo de un McLaren, ha sido un punto de inflexión para los de Faenza ya que, de aquí hasta final de temporada, deberían pelear por el 6º puesto en Constructores que ahora mismo ostentan. Carlos Sainz no se ha cortado y admite que en Toro Rosso temen que la rápida evolución de McLaren-Honda les arrebate ese sexto lugar.
"McLaren ha estado definitivamente por delante. Es un poco preocupante sabiendo todo lo que queda de temporada y su ritmo de desarrollo, pero intentaremos compensarlo, intentaremos ir lo más rápido posible y ver si podemos mantenerles detrás. Creo que el de Hungría fue un fin de semana sólido por mi parte, así que podemos ir a Alemania y cerrar la primera parte de la temporada realmente contentos y confiados con la posición en la que estamos a mitad de año. Con suerte llegarán mejoras en Alemania y eso debería hacernos dar un paso adelante en cuanto a rendimiento", explicaba Sainz.