La idea de la marca es centrarse ahora en la fabricación de coches híbridos, eléctricos y de combustibles alternativos, donde no cabe el NSX. Y es que en Honda piensan que, lejos que solucionarse la crisis mundial, lo peor está aún por llegar.
">"Mientras esperamos la más pronta recuperación de la economía mundial y la situación de mercado, Honda desarrollará negocios basados en el supuesto de que la situación empeorará el próximo año y llevará a la compañía hacia estos desafíos."
Honda se prepara así para los malos tiempos, dando un giro a su política de energía, con las nuevas alternativas como bandera, la cancelación ya comentada del nuevo NSX, la suspensión de llevar su marca Acura (coches de lujo de Honda) a Japón y, quizá, también el abandono de las 'American Le Mans Series'.Para los nipones: ">"Es crucial para el futuro fortalecimiento nuestra habilidad para continuar avanzando la tecnología medioambiental y aplicarla a productos atractivos y originales."