
"Todos los pilotos dirán que es una pena prohibir algunos test, pero creo que están todos un poco nerviosos porque significa que vamos a tener algo de vida. Vamos a ahorrar mucho dinero y no creo que haya mucha diferencia. Al principio mirar a los coches puede no ser muy bonito, pero al conducirlo he tenido unas sensaciones muy buenas, especialmente con los slicks. Puedes ir mucho más pegado a otros coches y creo que hará más bonita la carrera. Creo que es positivo".