Sin embargo, al final, la decisión de Marko ahora parece haber sido la correcta, después de que el holandés hiciera historia este pasado domingo al convertirse en el piloto más joven de la historia de la categoría en ganar un Gran Premio. Horner, jefe de Red Bull, compara a Verstappen con Sebastian Vettel, quién también empezó su exitosa carrera en el equipo. "No tenemos a un nuevo Sebastian Vettel; él es Max Verstappen".
A Kvyat, por su lado, quizás podría perdonársele su enfado al ver que Verstappen ganaba su primera carrera con Red Bull con el coche que él mismo dejó vacante días antes. "¿Si hubiera ganado esta carrera? Nunca lo sabremos, pero conozco mi potencial y puedo ganar carreras y mundiales. Solo parece ser que mi camino será más complicado. He de ser paciente".
El problema para Kvyat es que en Red Bull todos parecen estar contentos con el cambio de pilotos que ha habido en estas últimas semanas. "Creo que el regreso de Kvyat es muy poco probable en un futuro cercano, pero nunca puedes descartar nada. Cuenta con un contrato a largo plazo y seguirá ganando experiencia en Toro Rosso, sin estar bajo demasiada presión", añade Horner.