Salida espectacular de Ferrari
El Gran Premio empezaba con una salida que se abortaba en su primer intento. El motivo era la parada repentina del Red Bull de Daniil Kvyat, que por problemas mecánicos no llegaba hasta su posición de partida y quedaba aturdo en medio la recta de meta. El piloto ruso bajaba del coche y abandonaba la carrera antes de empezarla, tal y como ya le ocurrió en la edición del año pasado de esta prueba inaugural en Australia.
Tras ese percance, el Mundial y la carrera empezaban sin problemas, pero con una gran sorpresa en la parte delantera. El Ferrari de Sebastian Vettel salía como una bala desde la tercera posición, y se metía entre los dos pilotos de Mercedes, que en la primera curva se molestaban y hacían que Kimi Raikkonen tomase la segunda posición. A todo ello, Rosberg mantenía el tercer lugar, pero Lewis Hamilton se iba hasta el sexto puesto, viéndose superado por Max Verstappen y Felipe Massa, este último le acabaría pasando pocas vueltas después con la ayuda del DRS.
A partir de aquí empezaba una carrera distinta de lo esperado, con Vettel tirando fuerte al frente, con Raikkonen bloqueando el avance de Rosberg y con un Hamilton atrapado detrás de un pletórico Max Verstappen. Por detrás, Kevin Magnussen caía a la última posición tras pinchar en la salida, mientras que Esteban Gutierrez sufría problemas puntuales de potencia, que podrían resolver desde el Pit Wall. A todo ello, Carlos Sainz se mantenía séptimo por delante del Red Bull de Ricciardo, mientras que Fernando Alonso ascendía a la décima posición, aguantando las envestidas de Sergio Pérez por detrás.
El violento accidente de Alonso rompe la carrera
Iban pasando las vueltas y los pilotos con el compuesto superblando empezaban a tener algunos problemas. La variedad de neumáticos entre los pilotos de la parrilla era notable, con la mayoría con superblandos y unos pocos con el compuesto blando, sin nadie que se atreviera a colocar el medio, por el momento. Carlos Sainz, atrapado detrás de un Massa con mucha degradación, abría la ventana de pit stops, cayendo a la vigésima plaza pero pudiendo hacer el 'undercut' al brasileño cuando este parara vueltas después.
Poco tiempo después entrarían los dos grandes protagonistas de la carrera: Nico Rosberg y Sebastian Vettel, separados por una vuelta en este orden respectivo. El alemán de Mercedes a punto estuvo de superar al piloto de Ferrari, pero este se pudo defender bien de los ataques de Nico. A partir de ahí, Vettel podía establecer una distancia de seguridad para mantener la primera posición, que le permitió incluso adelantar de forma magistral a Hamilton, algo que no logró hacer Rosberg. A la vuelta siguiente, entraba el líder actual, Kimi Räikkönen, y por detrás le seguía Lewis Hamilton en la misma vuelta. Fue entonces cuando el británico sorprendió al aparecer con el compuesto medio, que nadie había usado en todo el fin de semana.
Pero dos vueltas después la carrera sufría un giro vital. Fernando Alonso, poco después de hacer su parada, intentaba superar al Haas de Esteban Gutierrez. En una maniobra de carrera involuntaria por parte de ambos, Alonso chocaba a alta velocidad contra la parte trasera del monoplaza americano, y posteriormente impactaba contra el muro, llegando a la grava de la curva 3 de forma lateral, lo que le provocó un vuelco impresionante y varias vueltas de campana que dieron un susto enorme a todos los espectadores. Ambos pilotos estaban bien, pero el McLaren estaba desintegrado y los desperfectos de la pista obligaban a sacar la bandera roja, reagrupando todos los vehículos al carril de box.
Mercedes acierta y Ferrari falla en la estrategia
Tras más de veinte minutos con la carrera paralizada por el accidente de Alonso y Gutierrez, la carrera reprendía la marcha bajo el Coche de Seguridad, que una vuelta después abandonaría la pista. Allí empezaban de nuevo las hostilidades, con Vettel escapando de Rosberg y Raikkonen, y por detrás Ricciardo en cuarto lugar haciendo un gran tapón: Verstappen y Sainz intentaban superarle sin éxito teniendo el constante aliento de Hamilton en su estela.
Pero poco después surgía otra de las imágenes del Gran Premio. Kimi Räikkönen sufría problemas de motor cuando rodaba tercero y entraba precipitadamente al box, a baja velocidad y con un humo transparente saliendo de la parte trasera del coche, que al pararse frente al box de Ferrari salían hasta llamas del coche. Una pena para el finlandés que tenía la gran posibilidad de optar a podio en esta carrera. Esto ponía a Ricciardo en zona de podio, a Verstappen cuarto luchando por meterse dentro las posiciones previlegiadas, y Sainz quinto aguantando como podía a Hamilton.
Al frente, Vettel con superblandos no podía escapar más de tres segundos de Rosberg con el neumático medio. A la larga la diferencia se iría deshaciendo por la alta degradación del compuesto superblando, lo que obligaría al alemán de Ferrari a parar al box otra vez para poner el compuesto blando. Vettel salía en cuarta posición, lejos de Hamilton y sobretodo a excesivos segundos de Rosberg para intentar la remontada por una victoria que parecía estar al alcance de la mano.
Hostilidades entre los Toro Rosso
Antes de la parada de Vettel, Carlos Sainz hacía una parada precipitada a boxes para sacarse de encima el compuesto blando, ya que se veía atascado detrás de Ricciardo y Verstappen, y no podía contener más a Hamilton detrás. Por ello, el madrileño paraba y salía en 12ª posición. Poco después, Verstappen hacía la misma maniobra tras quejarse por radio de no haber entrado primero. Además, el holandés vio como perdía tiempo al pillar desprevenido a sus mecánicos, que no tenían ni las ruedas preparadas. Eso hizo que Sainz le pasara, y el madrileño, tras superar a Pérez, se estancó detrás del Renault de Jolyon Palmer, lo que hizo que Verstappen se le enganchara detrás.
Verstappen empezó a presionar a Sainz en pista y por radio, diciendo a su equipo que le dejaran pasar porque estaba perdiendo mucho tiempo. Sainz se negó a dejar pasar a nadie, y tras muchos intentos superó en la primera curva a Palmer. Acto seguido, Verstappen se ponía a rebufo del británico y en la curva tres hacía una arriesgada pero impresionante pasada al piloto de Renault, para seguir detrás de Sainz hasta llegar al grupo que luchaba por la sexta plaza.
Los Toro Rosso se añadieron a la lucha, e incluso se tocaron entre ellos cuando Verstappen pecó de optimismo al intentar superar a Sainz en la penúltima curva, lo que provocó el trompo del holandés. Finalmente, se quedaron en esa novena y décima plaza, pese a los numerosos intentos de superar a Bottas en la parte final, una acción que se hizo imposible pese al buen ritmo del STR11, por culpa de la gran velocidad punta del Williams, que encima se beneficiaba de la potencia extra del DRS.
Vettel falla en la lucha final
Al frente de la carrera también había muchas incógnitas por resolver. Nico Rosberg iba a la suya con un ritmo constante y bueno, que dejaba a sus rivales por encima de los diez segundos, una distancia que fue cayendo a medida que pasaban las vueltas, pero que nunca llegó a preocupar al alemán. Pero detrás, Hamilton con más de treinta vueltas con el compuesto medio, veía como se acercaba por detrás peligrosamente Vettel, que montaba los blandos con muchas menos vueltas.
Vettel acabó alcanzando a Hamilton, y empezó a presionarle para intentar el adelantamiento a escasas vueltas del final. A dos vueltas de la conclusión, Vettel en uno de sus últimos intentos, se pasaba de frenada en la penúltima curva y se iba a la hierba, perdiendo la distancia con Hamilton y las opciones de alcanzar la segunda posición en esta carrera que ya se le había escapado por la estrategia.
De esta forma, Nico Rosberg llegaba eufórico a la meta logrando su 15ª victoria y la cuarta consecutiva tras obtener el triunfo en las tres últimas de 2015. Pese a verse todo el fin de semana por detrás de Hamilton, el alemán minimizó los daños en la salida y eso fue clave para aprovechar el acierto de su equipo en la estrategia y mantenerse con un buen colchón de tiempo sobre su compañero Lewis Hamilton. El británico salvó los muebles con la bandera roja y al poner los medios, pero de no ser por ello podría haber sufrido mucho por llegar al podio, al llegar a caer a la séptima posición.
Sebastian Vettel ha completado un podio agridulce, sabiendo que podría haber ganado esta carrera y además perdiendo la oportunidad de adelantar a Hamilton para ser segundo en la parte final. Justo detrás, Daniel Ricciardo ha sido cuarto delante su afición, haciendo una buena estrategia que le permitió adelantar a Felipe Massa en la parte final, quien cerró el Top 5 pese al discreto rendimiento de su Williams. En el caso del brasileño, la estrategia también fue clave para mantener este resultado, ya que de no ser por ello otro gallo cantaría.
En sexta posición terminó un fenomenal Romain Grosjean, en una de sus mejores carreras tras salir de la 19ª posición en el estreno del equipo Haas. El regalo a los americanos es inmenso tras las grandes dificultades que han afrontado esta pretemporada y este mismo fin de semana. Sin duda será un golpe de moral muy alto para todo el equipo, y podrán coger una línea ascendente en las próximas carreras. Nico Hulkenberg, Valtteri Bottas y los dos Toro Rosso cerraron la zona de puntos. Jolyon Palmer se quedó en las puertas en su debut con el Renault pese hacer una buena carrera. El británico finalizó delante de su compañero Magnussen, de Pérez, Button, Nasr y Pascal Wehrlein.
La próxima carrera del Mundial de Fórmula 1 se disputará dentro de dos semanas en el circuito de Sakhir, que acogerá la prueba nocturna del GP de Baréin del 1 al 3 de abril.
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Australia 2016