
"Obviamente, la decisión tardía sobre el motor fue un reto, pero encontramos una solución a tiempo, y todo el equipo ha trabajado de forma increíblemente dura para recuperarse durante el invierno. Por ello, estamos listos para seguir mejorando a partir de lo que logramos en la segunda mitad de 2015, y esperamos mantener esa forma en las primeras carreras de 2016", explica Christian Horner, jefe del equipo de Milton Keynes.
Por su parte, Adrian Newey, jefe técnico del equipo, explica: "Normalmente me preguntan por qué parte del coche estoy más contento, pero con las regulaciones estables que tenemos por el momento es complicado encontrar nuevas áreas que explotar. Por ello, lo que hemos tratado de hacer es concentrarnos en que el monoplaza tenga un paquete coherente en todas las partes: la suspensión, la dinámica del chasis y la aerodinámica, para que juntas funcionen en armonía. Creo que hemos podido trabajar desde las lecciones aprendidas el año pasado y todas las indicaciones de nuestras simulaciones sugieren que el chasis de este año debería de ser bueno".