Después del accidente, Schumacher pasó varios meses en coma en un hospital de Grenoble, localidad cercana a la pista de esquí donde tuvo el incidente, y luego fue trasladado a una clínica de rehabilitación. En septiembre de 2014, el expiloto de Ferrari y Mercedes volvió a casa y, desde entonces, su familia ha querido mantenerse alejada de la prensa y respetar la privacidad de su ser querido.
Sin embargo, ha habido noticias de otros círculos cercanos, como Luca di Montezemolo, expresidente del equipo Ferrari, quien recientemente comentó que las noticias sobre el alemán "no son tan buenas como habríamos esperado".
Y a pesar de que Kehm, su representante, no reveló nada sobre Schumacher en la presentación de la exposición en Marburg, sí que indicó en declaraciones a AAP: "Por supuesto, echamos de menos a Michael en días como estos. Por desgracia, no podemos cambiar lo que ha pasado". Además, Kehm añadió que espera que "algún día regrese".