A pesar de que en los últimos Grandes Premios los aficionados no han llenado las gradas, la vuelta de México al calendario tras 23 años ha sido un gran estímulo para abarrotar las gradas como no se había visto en los últimos años.
Más de 300.000 apasionados de la F1 asistieron al evento en el Autódromo Hermanos Rodríguez a lo largo de los tres días, creando una atmósfera de carnaval que el tres veces campeón del mundo asegura no haber visto nunca en el tiempo que lleva en la Fórmula 1.
"Es lo mejor que he visto en mi vida. Lo mejor, de verdad, lo que han conseguido aquí; nunca había visto algo así. Cómo lo han organizado, cómo lo han llevado a cabo, toda la gente estaba animadísima, así de sencillo, era increíble. Podías sentir a la gente desde la pista. Todo fue genial: los coches, la gente, los pilotos. Fue una unión perfecta, por eso la carrera tuvo tanto éxito."
El ingrediente mágico
La zona del estadio en particular fue algo para recordar, ya que el circuito recorría un anfiteatro a rebosar con 30.000 personas. Respecto al ingrediente mágico, Lauda dijo: "la magia son los mexicanos, los organizadores que han hecho que haya sido posible. La manera en que organizaron las plazas para los espectadores es lo mejor que he visto jamás, sobre todo con el podio delante de toda la gente. La Fórmula 1 volvió al momento en el que podías sentirla y tocarla, y creo que eso es lo más importante."
Cuando le preguntaron por su mensaje al máximo mandatario de la Fórmula 1 Bernie Ecclestone, Lauda respondió: "Haz esto con todos los demás GPs. Todos (los promotores de otros GPs) lo han visto en la televisión, lo bien que puede hacerse."
Sobre si la Fórmula 1 debería volver a realizar Grandes Premios más tradicionales, Lauda dijo: "todo dependerá de si los organizadores de Sudáfrica o Argentina pueden hacer una carrera como esta. Ha sido todo perfecto."