Las últimas informaciones publicadas en la prensa indican que Schumacher ha perdido más de 30 kilos, y la familia del piloto sigue apostando por el tratamiento que le están aplicando para conseguir que el ex de Mercedes se recupere cuanto antes.
"Tratamos de mantener un balance a la hora de visitarle en vez de llamarle para no ser una molestia. He ido a verle varias veces. Corinna me llama a menudo y me mantiene informado. Solo seguimos rezando cada día para que se recupere hasta un punto en el que...bueno, es lento, pero siempre hay esperanza", explicaba Brawn en declaraciones al periódico Daily Express.