Respecto a esas conversaciones, el jefe de McLaren comentó que tiene muy claro que no hay duda sobre el compromiso de Honda con la F1 y que resolverán pronto sus problemas: "En todos los niveles de Honda saben cuál es el reto de la F1, y saben exactamente dónde estamos hoy en día". De hecho, Yasuhisa Arai, director de Honda Motorsport, ha reconocido que el gran problema es el ERS (los sistemas de recuperación de energía) y sus componentes en el motor. "En circuitos con largas rectas la potencia extra acaba agotándose, y eso significa que perdemos unos 160 caballos".
"Esa pérdida es mucho mayor que lo que podemos ganar del motor de combustión. Pero poder solucionar esta situación este año será muy complicado, porque requiere un rediseño, y ya estamos trabajando en ello para la próxima temporada", añade el japonés. Cuando se le preguntó si las reglas actuales ofrecen a Honda suficientes 'tokens' para realizar cambios importantes de cara a 2016, Arai insistió: "Sí, no habrá problemas con eso".
Eso es lo que espera Alonso, quien ha admitido que las carreras restantes en 2015 serán testigos de los problemas que McLaren ha tenido todo el año. "Será complicado ver mucho progreso. Las limitaciones que tenemos ahora son claras, y esto requiere algo de tiempo durante el verano para poder avanzar más. Continuaremos usando el resto de carreras para trabajar en la configuración del año que viene, mejorar en el apartado aerodinámico y obtener algo más de experiencia con el motor. Ahora mismo hemos de ser pacientes y comprender que no podemos hacer mucho en las cinco carreras restantes. Hay mucho espacio para mejorar, pero han de cambiar muchas cosas. Soy optimista y los primeros signos para el año que viene pintan bien, así que veremos".