"Realmente no sabía qué esperar, todo era muy nuevo. Siempre cuanto más se espera menos se obtiene, y a veces cuanto más trabajas los resultados no llegan, pero siempre suele ser así en un nuevo proyecto, rara vez cumples con las expectativas. Sí, es un año difícil. Nadie esperaba que tuviésemos tan pocos puntos en estos momentos. Ahora el objetivo es entender lo que debemos cambiar para la próxima temporada, vamos a hacerlo y creo que podemos dar un buen paso adelante el próximo año", admitió el británico.
No obstante, Button se mostró confiado en la capacidad de dos grandes empresas como McLaren y Honda para diseñar un monoplaza competitivo en los próximos años: "Hay que ser positivo, hay que tener confianza. Yo creo en la gente con la que trabajo, tienen mucho talento. Honda va a insistir hasta el final. Si llegarán a ser campeones o no, no lo sé, nadie lo sabe, eso es la competición y la emoción del desafío, tienen talento y recursos y McLaren también. Y está Alonso... Tendrán que pasar dos años probablemente, o quizá cinco, tampoco lo sé. El objetivo es que cada uno trabaje tan duro como sea posible, ellos tienen los recursos para alcanzar el éxito. Espero que ellos también tengan el personal adecuado en el lugar preciso y que puedan entender esta nueva tecnología en la F-1".
Futuro incierto
"Lo cierto es que si estoy en F-1 el próximo año quiero ser competitivo y por supuesto nadie tiene garantías de que eso vaya a ser así, así que todo depende del sentimiento que tenga dentro de mí. Es una decisión muy difícil y esa es la primera que debo tomar, decidir mi futuro y lo haré pronto. Seré más feliz que ahora seguro. Si no sigo en F-1 estaré corriendo en otra disciplina automovilística, aunque quizá no el año que viene, a veces se necesita un poco de descanso. Veremos... Hay muchas decisiones que tomar pronto.", confesó el piloto británico.
