Ver a miles de brasileños saltando de alegría cuando Felipe Massa cruzaba la línea de meta en primera posición mientras no se daban cuenta de que Lewis Hamilton, que no conseguía dar caza a Sebastian Vettel, adelantaba a Timo Glock para hacerse con el Mundial, ha sido de lo más dramático que se ha vivido nunca en la Fórmula 1.
En la otra cara de la moneda estaba el equipo McLaren que cuando se enteraron de que tanto Vettel como Hamilton habían adelantado a Glock antes de afrontar la última subida hacia la meta explotaron en saltos, risas, lloros, felicitaciones,...
Un Mundial que cambió de manos en la última curva y que se le escapó al héroe local, al mismo por el que pocos apostaban antes que los semáforos se apagaran, ha sido un auténtico "Maracanazo" con todas las de la ley.
Pero nadie le puede echar la culpa a Timo Glock que mucho hizo con aguantarse bailando sobre el resbaladizo trazado de Interlagos con gomas de seco para acabar en una meritoria 6ª posición final. Antes de la lluvia, Glock iba 7º, a unos 20 segundos de Hamilton, y por su apuesta de mantenerse con gomas de seco casi acaba la carrera 4º, así que nadie ponga en duda las manos ni las intenciones de Timo.
Quizás nunca vuelva a verse algo así: una carrera y un título que parecían sentenciados a falta de 8 vueltas para el final, pasó a ser la lucha más cargada de emoción de la historia.
Brasil 2008 ya es una de las carreras que formará parte de los anales de la F1. Pero lo cierto es que Brasil siempre nos depara grandes emociones, este GP lo guardaremos con el de 2007, el de 2006,....
Vettel adelanta a Hamilton y poco después ambos pasan a Glock: