Así pues, una de las opciones que contempla Renault es comprar otro equipo y convertirse en escudería, como ya lo fue antes de 2011. Y es que el actual equipo Lotus evolucionó de Renault, pero este año decidió unirse a Mercedes y confiar en su motor, un cambio que ha visto a los de Enstone de nuevo en los puntos. No obstante, sigue siendo uno de los equipos que continúa teniendo problemas económicos, pero su director ejecutivo, Matt Carter, ha descartado una posible venta.
"Sé que Renault está evaluando su papel en la F1 en estos momentos. Creo que están tratando de decidir si quieren fabricar simplemente motores, abandonar el deporte o plantearse ser un equipo. Mis accionistas me han dicho específicamente que el equipo no está en venta", ha indicado Carter recientemente en declaraciones para Reuters.
Con todo esto, es más que probable que Toro Rosso finalmente pueda ser la 'víctima' y se convierta en el equipo comprado por Renault. Por su parte, el futuro de Red Bull en la F1 cada vez está más en duda que esté ligado a Renault más allá de 2016, sobre todo después de que Helmut Marko comentara hace poco en la BBC que "o Audi viene a la F1 o nos vamos".