El equipo Red Bull, que utiliza el tren de potencia fabricado por Renault Sport F1, tiene muchos problemas para alcanzar el ritmo de Mercedes y de Ferrari quienes han dominado en las dos primeras carreras. El piloto australiano solo pudo acabar en la sexta posición en el Gran Premio local, ante su afición, doblado por el ganador, Lewis Hamilton. Por si eso fuera poco, en el último Gran Premio de Malasia, el piloto de Red Bull solo pudo acabar en la décima posición.
Esperan lograr al menos una victoria
A estas alturas del año pasado, el piloto australiano tuvo una abandono y una descalificación, antes de conseguir subir al podio en cinco ocasiones y de conseguir tres victorias a lo largo de la temporada. Por ello, las esperanzas de que la temporada mejore sigue intactas.
"Creo que esperábamos que en esta nueva temporada pudiéramos conseguir más victorias que el año pasado y al menos intentar luchar por el título. Después de las dos primeras carreras de este año, creo que hay que ser un poco más cautelosos. Aunque creo que todavía podemos tener el objetivo de ganar al menos una carrera. Seguramente no será en China, pero la temporada es larga y creo que, sin duda, podemos conseguirlo. Tenemos que seguir trabajando y espero que consigamos ganar una carrera antes de Abu Dhabi en Noviembre", ha explicado el piloto australiano del equipo Red Bull.
El piloto de 25 años también ha comentado el gran trabajo realizado el año pasado, pues el equipo también empezó con muchos problemas en la temporada y al final consiguió tres victorias. El australiano afirma que pensar que esto puede volver a suceder le da "mucha mentalidad positiva" para pensar que se puede cambiar la suerte del equipo también este año.