"Una vez que eres el líder del campeonato después de siete carreras, deberías de poder luchar por el campeonato. Al principio creo que perdí un poco de regularidad. Esperaba que pudiéramos luchar por el campeonato. No hemos mejorado mucho últimamente con el coche así que esto no me ayuda, pero estoy a 12 puntos del líder. En las últimas dos carreras todo puede pasar".
"En las tres últimas carreras, y más en esta, se ha visto que todo es posible. En Monza tuvimos un tiempo variable. Empecé undécimo y acabe tercero. En Singapur podría haber acabado fácilmente en el podio. El safety car arruinó mi carrera. Tenemos que estar ahí y espero que esto sea un empujón para las dos próximas carreras y que podamos conseguir unas pocas décimas que me ayuden en la lucha".
"Kimi demostró el año pasado que todo es posible. Tengo dos pilotos por delante y no es ningún secreto que en circunstancias normales su ritmo es más alto. Pero todo puede suceder".