No obstante, los comisarios no han querido emprender ninguna acción contra el equipo, y han alegado que la escudería "ha asistido al evento, traído un cantidad considerable de material y equipamiento, producido todos los documentos requeridos para las pruebas, llevado a cabo los chequeos y preparado sus dos coches para competir. Además, han traído suficiente personal para preparar los coches para la competición, continuado trabajando y haciendo todo lo posible para permitir que sus coches compitieran y estuvieran preparados hasta el punto de estar mecánicamente completos".
Los comisarios añadieron que Manor "no habría podido conseguir una configuración de software que permitiera a ambos coches salir en los entrenamientos ni en la sesión de clasificación, aún incluso habiendo trabajado fuera del horario estipulado". Manor "ha usado todos los esfuerzos posibles para asegurar que sus coches fueran capaces de competir en competición activa", según finalizan los comisarios.