"Todo el mundo en Brackley está estresado. Hay muchas cosas por las que preocuparse. Lo que me molesta este año es que no haya test en Baréin, como el año pasado. En España, las temperaturas en febrero son muy bajas y luego tienes que ir a Melbourne donde son muy altas. No entiendo esta programación", ha comentado Lauda.
Además, también ha comentado el tema sobre el desarrollo de los motores para 2015 más allá de la fecha original establecida: "Los que han llegado nuevos, como Honda, también quieren la misma posición que los demás, cosa que entiendo por razones de una competencia justa".
Una F1 como la de antes
Lauda, mientras tanto, también quiere estar pendiente del futuro, ya que Bernie Eccleston afirma que habrá grandes cambios en los coches del futuro y de los motores para 2017. El jefe no ejecutivo de Mercedes está de acuerdo con el máximo mandatario de la Fórmula Uno.
"Ahora mismo, lo coches que tenemos le permiten a cualquier piloto, ya sea de la Fórmula 3 o de la GP2, ir rápido y sin correr demasiados riesgos. Los coches actuales de la Fórmula Uno se pueden conducir casi como si fueran coches de calle. Quiero un coche para el futuro que tenga 1.200 caballos de potencia y con neumáticos anchos. La Fórmula Uno necesita ser más rápida y más difícil, como lo era antes", ha concluido Niki Lauda.