"Confío totalmente en el equipo y en la gente que construye los coches, en los que dirigen el equipo y en los mecánicos. La gente habla, y os prometo que ellos no son los que están diseñando el coche o los que están en el túnel de viento. Estoy seguro de que podemos tener un buen paquete. ¿Será lo suficientemente bueno? El tiempo lo dirá, pero tenemos mucho trabajo que hacer y hemos aprendido mucho de este año", indicó el finés.
Solucionando problemas
Sin embargo, Räikkönen se ha mostrado prudente: "No esperamos de repente estar delante y ganar carreras, pero estoy seguro de que podemos dar un gran avance y estar luchando y mejorando las cosas. Pero, como he dicho, con los nuevos coches siempre puede haber muchas habladurías pero, cuando vayamos al circuito y hagamos el primer test, entonces sabremos de verdad dónde estamos y cómo se siente. Creo que sabemos dónde están los problemas, y la gente es lo suficientemente inteligente como para tomar las buenas decisiones y arreglarlos".
Y, a pesar de sus problemas este año, Räikkönen dejó claro que está contento de optar por regresar a Ferrari tras haber ganado carreras con Lotus: "Sin duda, tomé la decisión adecuada. Obviamente, los resultados no han sido los que quería o los que quería el equipo, pero así son las cosas. Mejoramos desde el inicio y ha habido momentos mejores. Pero no es sencillo solucionar algunos problemas y tener las cosas exactamente como quieres: surgen pequeños problemas aquí y allí y, al final, pagas un precio enorme por ello".
