Será Daniel Ricciardo quien se ponga a los mandos del RB7, mientras que el cuatro veces campeón del mundo conducirá el prototipo del Infiniti Q50 Eau Rouge, en cuyo diseño ha participado el piloto alemán. Está previsto que la exhibición tenga lugar al mediodía en Congress Avenue y, una vez finalizada, los aficionados más afortunados también tendrán la oportunidad de dar una vuelta en el Q50 como copilotos de Vettel y Ricciardo.
El evento servirá como fantástico adelanto de la carrera en el Circuito de las Américas, que tendrá lugar el próximo 2 de noviembre. "Estamos encantados con Infiniti por brindar a los aficionados una oportunidad para vivir de cerca la potencia, velocidad y emoción de la Fórmula 1 y el Gran Premio de Estados Unidos. Ver estos increíbles coches en acción en la capital de Texas atraerá a nuevos aficionados al mismo tiempo que ofrecerá un fascinante avance para los seguidores de la Fórmula 1", explicó complacido Dominic Iacono, director de marketing del Circuito de las Américas.