"Tenemos un gran equipo de fiabilidad, un grupo de personas que están totalmente dedicados a la calidad y, teniendo eso en cuenta, aún es más sorprendente que sigamos teniendo estos problemas. Imagino que todo el grupo necesita calmarse antes de que dejemos de tener abandonos, ya que es inaceptable. Creo que ya han sido cuatro [abandonos que hayan decidido un campeonato], y es algo que no sería en absoluto satisfactorio. No queremos ver que un coche deja tirado al piloto, así que hemos de replantearnos las cosas, seguir adelante concentrado y averiguar qué podemos hacer para evitar estos abandonos y problemas de fiabilidad", indicó Wolff.
Casi igualados a puntos
El de Mercedes también admitió que el repentino cambio en la situación del Mundial ha creado aún más presión en Mercedes para asegurar que no surjan más problemas: "[Que haya tres puntos de diferencia] empeora aún más la situación. No quieres ninguna reevaluación porque los dos están casi igualados a puntos, ambos tienen casi la misma probabilidad de ganar el título, así que la única consecuencia es mantenerlo todo equilibrado y neutral. Si pudiéramos hacer algo más para tener más fiabilidad, lo haríamos. Me volvería a romper el brazo para frenar esta poca fiabilidad".
Una vez que Rosberg abadondó en Singapur, Wolff ha admitido que hubo dudas todo el tiempo sobre la fiabilidad del coche de Hamilton, a pesar de que la habilidad del piloto nunca se cuestionó. "Cuando te quedas con un coche y es el único arma ahí fuera, dudas de todo. Hasta que vimos que la parada fue bien y que salió dos segundos por detrás de Sebastian y que probablemente le alcanzaría, hubo dudas. Sin embargo, Lewis estuvo realmente increíble [tras el coche de seguridad]. Esto son los días de Lewis Hamilton, los días en los que reconoces lo grande que es y lo que marca la diferencia entre las superestrellas y las estrellas, entre los mejores y los buenos".