
El director general de Renault Sport F1, Rob White, dio explicaciones al respecto. "La oportunidad de cambiar las especificaciones del hardware son muy limitadas durante el transcurso de la temporada. Hasta el momento no ha sido un obstáculo para el progreso que hemos sido capaces de hacer, pero estamos presionando en una hoja de ruta de desarrollo que claramente tendría más oportunidades de mejorar si si pudiéramos cambiar la especificación. En este momento, las regulaciones son explícitamente claras, no podemos cambiar las especificaciones sin la previa aprobación de la FIA, que normalmente no se suele dar".
La congelación no es excusa
Aunque la congelación actual limita la oportunidad de Renault para cerrar la brecha con Mercedes, White cree que todavía hay cosas que se puedan hacer para seguir adelante. "Hemos sido capaces de hacer mejorar y avances significativos este año para alcanzar a nuestros competidores. Todavía tenemos trabajo en progreso y entregaremos más mejoras. Pero, por supuesto, la mayoría de las piezas se entregarán durante el invierno, ya que no pueden ser entregadas en el transcurso de la temporada por razones de regulación tanto prácticas como legítimas. Las normas técnicas y las normas deportivas son las limitaciones con las que trabajamos y nuestro trabajo consiste en sacar lo mejor de ello. No se sabe si con diferentes restricciones de homologación el resultado sería mejor o peor".
Sin embargo, White reiteró que la mayor falta de Renault este año ha sido empezar su programa con los turvo V6 demasiado tarde. "Estábamos con nuestro establecimiento de metas internas y, por lo tanto, no podemos estar satisfechos. No fuimos lo suficientemente rápidos en la pista para responder o para satisfacer a nuestros equipos y, por supuesto, nos hubiera gustado haber hecho las cosas de manera diferente y llegar a un resultado distinto. Pero mirando hacia adelante, nuestra mentalidad es la de buscar la mejor interacción con el fin de corregir eso".