Los dos pilotos negaron en su momento ser los responsables del evento, y los comisarios de la carrera decidieron que el mexicano había tenido la culpa y, por eso, le sancionaron con cinco posiciones en la parrilla de salida del próximo Gran Premio.
No obstante, Force India recurrió la decisión, alegando que la reunión inicial con los comisarios se produjo antes de que el equipo hubiera hablado con Pérez sobre el accidente, ya que el piloto estaba aún en el hospital. Con estos argumentos, la FIA decidió revisar de nuevo el caso este viernes en Austria. Así, tras escuchar la explicación de Pérez, los comisarios no han visto ninguna razón para no mantener su decisión original y, por eso, el mexicano mantiene la sanción de cinco posiciones.