Daniel Ricciardo ha admitido que no tenía esperanzas de mantener el podio cosechado en el Gran Premio de Australia que, finalmente, le ha quitado de las manos la FIA tras el veredicto de la apelación de Red Bull.
El australiano fue descalificado en Melbourne después de que los comisarios vieran que su monoplaza estuvo constantemente superando el líomite máximo de flujo de combustible, según el sensor de la FIA instalado en el RB10. El equipo apeló esta exclusión de la carrera, indicando que el sensor ofrecía lecturas erróneas y que Riccardo no había excedido el límite de flujo de gasolina durante la carrera, pero la federación decidió mantener la sanción.
"Obviamente, estoy un poco decepcionado, pero tenía que seguir adelante. El domingo por la noche en Melbourne, el daño ya estaba hecho y pasé por diferentes estados de ánimo, pero tenía que seguir adelante. Tenía esperanza, pero tampoco esperaba demasiado de ello [de la apelación]", señaló Ricciardo en ESPNF1. Además, el piloto australiano explicó que intentaría recuperar los puntos perdidos este fin de semana en el Gran Premio de China. "Eso es, y esoy aquí en Shanghái, y ya no hay más 'peros' ni condicionales. Tengo doce puntos y tengo que intentar recuperar posiciones".