Las tres carreras disputadas en lo que va de temporada las ha ganado el mismo equipo, Mercedes, y el jefe de ingenieros de Ferrari no duda en marcar unos objetivos a corto plazo más realistas para la Scuderia: "Estamos trabajando a fondo para reducir la distancia con respecto a los equipos punteros, teniendo Mercedes una ventaja considerable sobre los demás. Actualmente, nuestra prioridad es establecernos como el segundo mejor equipo. Estamos trabajando en todas las partes del coche e intentando dar pasos tan grandes como podamos en cada carrera".
Todo un reto para la aerodinámica
Los 5.451 kilómetros del Circuito Internacional de Shanghái pondrán en un brete a las nuevas unidades de potencia y a los neumáticos que necesitarán de un cuidado especial, sobre todo los traseros, por las cargas a las que se verán sometidos en las largas curvas del trazado. "El de China es un circuito interesante, que presenta una buena variedad de distintos tipos de curvas. Hay giros muy largos de baja velocidad al principio, curvas de alta velocidad en medio, y luego una recta muy larga de casi 1,3 kilómetros; para la recta, obviamente se necesita configurar el coche para tener una buena velocidad punta. Sin embargo, a pesar de esta recta, normalmente en Shanghái los equipos buscan una carga aerodinámica alta y, siendo esa recta una verdadera oportunidad para adelantar, estoy seguro de que todos buscarán el mejor compromiso posible para poder defenderse y atacar", explica Pat Fry.
Así pues, el equipo Ferrari afrontará el fin de semana en Shanghái con el enfoque habitual y con la esperanza de que el F14-T sea más competitivo con el trabajo realizado desde el inicio de temporada. "Sabemos lo que tenemos que hacer. La gente está trabajando al 100%, pero lleva su tiempo", confiesa Kimi Räikkönen con su franqueza habitual sobre lo que le espera al equipo del Cavallino Rampante.
