Tanto el equipo como el piloto están trabajando en solucionar la forma en la los sistemas de recuperación de energía en la manejabilidad del coche, pero el Campeón del Mundo de 2007 ha admitido que es poco probable que las cosas se solucionen de forma inmediata. "Sabemos más o menos lo que queremos hacer, pero algunas cosas no ocurren de la noche a la mañana", señaló Räikkönen en Autosport.
Cree en poder superar la situación
"Lleva tiempo producir ciertas partes o encontrar la forma adecuada de poner las cosas en su sitio. Tampoco podemos prometer que se vayan a arreglar los problemas una vez que obtengamos todo lo que queremos. Ya he estado en situaciones como estas anteriormente y, a veces, lleva su tiempo. Por desgracia, no es la posición más sencilla desde la que empezar, pero teniendo en cuenta lo difícil que fue todo, pudimos superarlo. No es lo que queremos conseguir, pero podría haber sido incluso peor. Estoy seguro de que solo podemos ir a mejor desde ahora", añadió el finés.
Por su parte, el jefe del equipo, Stefano Domenicali, reiteró que la Scuderia está haciendo lo que puede para ayudar a Räikkönen, y espera poder progresar a tiempo para el siguiente Gran Premio: "Necesitamos ayudar a Kimi a tratar de encontrar el equilibrio adecuado en el coche, se lo merece. Hubo una mejoría [este fin de semana], pero todavía no estamos donde queremos. Como equipo, hemos de asegurarnos de que haremos todo lo posible para ayudarle con su estilo de conducción, y estoy seguro de que en Malasia irá mucho mejor".