"Por suerte, la F1 es más segura hoy en día. La FIA ha sido muy eficaz a la hora de asegurarse de que los ingenieros gastan su energía y su ingenio para tener los coches seguros para los pilotos y los espectadores. Uno de los grandes éxitos que se ha logrado es que hoy en día el riesgo está calculado. En efecto, hay riesgos que son aceptables y otros que no. Esto ha mejorado en F1, aunque siga siendo un deporte peligroso. Tenemos una ley para llevar casco en el Reino Unido, y aún hay países que no la tienen. Las cosas simples pueden, a veces, salvar vidas", señaló Hill.