Caterham aterrizó en la F1 bajo el nombre de Lotus Racing junto a otros dos equipos en el año 2010, cuando se habló de un techo de costes y luego la idea se abandonó. Ninguno de ellos ha logrado puntuar en estas cuatro temporadas, y el equipo español HRT incluso ha desaparecido de la parrilla por problemas económicos. El año pasado, Caterham acabó en la última posición de la tabla del Mundial de Constructores.
Reflexionar sobre la situación
Además, el equipo de fútbol que dirige Fernandes perdió su posición en la Premier League y bajó de categoría. El malasio comparó, de forma negativa, la F1 con el fútbol, alegando que era demasiado predecible, demasiado cara, no lo suficientemente emocionante y con oportunidades insuficientes para los propensos a perder de crear expectativas: "El deporte ha de examinarse a sí mismo. Creo que, si vamos a cada carrera y no somos competitivos, que estamos a dos segundos por detrás de todos, entonces no hemos progresado nada. Si no somos competitivos hemos de examinarnos seriamente y ver si esto tiene sentido".
Sin embargo, Fernandes señaló que sus palabras no deben tomarse como un ultimátum, ya que cree que Caterham podría hacer el progreso esperado en un momento en el que llega un gran cambio técnico: "Estoy diciendo estas cosas con la confianza de creer que podemos hacerlo. De no ser así, no estaría aquí. Pero también soy realista, y si no lo logramos...no creo que nadie en la oficina espere que sigamos siendo últimos. Pero estamos lo suficientemente confiados de que deberíamos ver algo de progreso".